Una bebé de tan solo dos años perdió la vida a manos de su padrastro, quien la arrojó al río en Cusco después de golpearla brutalmente.
El motivo de este horrendo crimen fue aún más escalofriante: el padrastro habría perpetrado este acto atroz debido a que la niña habría dañado su teléfono celular.
El horrendo suceso, que ha conmocionado a toda la región, ocurrió en el distrito de San Jerónimo. Inicialmente, la madre de la niña, presuntamente cómplice en el crimen, denunció la desaparición de la menor. Sin embargo, las investigaciones de la Policía Nacional del Perú (PNP) llevaron al esclarecimiento de los hechos y a la detención de la pareja implicada en este crimen sin sentido.
El padrastro, identificado como Carlos Fernando Orccosupa Rojas, lanzó el cuerpo de la bebé al río luego de golpearla en todo su cuerpo. Posteriormente, la madre de la pequeña confesó su participación en el homicidio después de ser interrogada por las autoridades.
El cuerpo de la bebé presentaba múltiples lesiones, supuestamente infligidas con un cable de cargador de teléfono y otros objetos contundentes. Según el jefe de la División de Investigación Criminal del Cusco, Luis Cordero, las lesiones son evidentes y parecen haber ocurrido en los últimos meses. Además, se señaló la presencia de una mordedura humana en la zona íntima de la niña.
En respuesta a este terrible crimen, el Primer Juzgado de Investigación Preparatoria de Cusco ordenó la detención preliminar por 7 días contra Carlos Fernando Orccosupa Rojas. Esta medida fue dispuesta por la dependencia subespecializada en Violencia contra las Mujeres e Integrantes del Grupo Familiar – SNEJ Cusco, bajo la dirección de la magistrada Lissette Aracelly Sánchez del Mar. La justicia debe prevalecer en casos tan desgarradores como este.
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