El dueño de la empresa minera LIBMAR Segundo Nicolás Cueva Rojas, rompió su silencio tras el asesinato de 13 trabajadores en Santa María, Pataz. Sus declaraciones ante el Ministerio Público refuerzan la hipótesis de una traición interna como causa del crimen.
Cueva señaló como principal sospechoso a Miguel Rodríguez Díaz, alias ‘Cuchillo’, quien habría contado con complicidad desde dentro de la minera Libmar SAC. Apuntó directamente a José Ramiro Lozano Peche, alias ‘Técnico’, encargado de reclutar personal de seguridad y presuntamente responsable de coordinar con bandas criminales armadas que operan en la zona.
Según relató Cueva, los trabajadores fueron atrapados el 27 de abril luego de que delincuentes dinamitaran el ingreso al nivel 2410 de la mina. Afirmó que los criminales prometieron liberar a los mineros tras robar el mineral, pero advirtieron que los matarían si se alertaba a la Policía. Un colaborador eficaz reveló que ‘Técnico’ habría entregado el control del nivel 2520 a ‘Cuchillo’, confirmando la posible alianza entre ambos.
Las investigaciones siguen en curso, mientras las familias de las víctimas claman justicia por una de las peores matanzas mineras en la región.
