Más de 250 mil personas se reunieron en la Plaza de San Pedro para darle el último adiós al Papa Francisco. La misa duró dos horas y fue oficiada por el cardenal Giovanni Battista Re. El féretro ya fue llevado a la Basílica de Santa María la Mayor, donde será sepultado.
En total, 130 delegaciones asistieron al funeral, entre ellas líderes como Volodymyr Zelensky y Donald Trump. Ambos sostuvieron un breve encuentro antes de la ceremonia. El ambiente fue de profundo respeto, con fieles de todo el mundo en oración y silencio.
El cardenal destacó que Francisco fue un “Papa con el corazón abierto a todos”. Su cercanía con el pueblo y su defensa de los más pobres marcaron su pontificado. Fue un líder espiritual que no tuvo miedo de romper esquemas y ser voz de los que no tienen voz.
La delegación peruana también estuvo presente con autoridades, religiosos y fieles. Muchos viajaron por su cuenta para despedirse del primer Papa latinoamericano. Se va un pastor sencillo, pero deja un legado que seguirá inspirando desde cada rincón del mundo.