Los padres de familia del Colegio Ramiro Ñique Espíritu protestaron para exigir que sus hijos no sean distribuidos a otros centros educativos de Moche. En tanto, el director afirma que solo faltan los acabados para que la obra de reconstrucción sea entregada.
Alzaron su voz para oponerse a que sus hijos sean distribuidos en distintos colegios del distrito de Moche, dado que la obra de reconstrucción de la Institución Educativa Ramiro Ñique Espíritu no es entregada por la ausencia del supervisor.
El director del colegio, armando flores informó que solo falta la ejecución del 7% de la obra que contempla, acabados.
Son un promedio de 600 estudiantes de primaria y secundaria que se quedarían en las aulas prefabricadas, pero los demás irían a otros colegios y los padres se niegan, pues ello implica gastos adicionales para el traslado.
Tras una conversación con el vicegobernador regional, el director informó que el gobierno regional respetará los términos del contrato y el nuevo plazo de entrega sería octubre.
Cabe indicar que el colegio acoge a 1600 alumnos que continúan recibiendo clases semipresenciales.