
Familiares de uno de los mineros asesinados en la provincia de Pataz exigen justicia. El padre de la víctima, Alexander Casas, agregó que su hijo trabajaba en una garita y fue asesinado en el socavón.
En el distrito trujillano de La Esperanza, familiares y amigos de uno de los agentes de seguridad de la minera Poderosa, Alexander Casas Chiza, exigen justicia. Carlos Casas, el padre del joven de 22 años asesinado en la provincia de Pataz, añadió que tiene muchas dudas. Según él, su hijo, el día del crimen, adelantó su horario de trabajo de las 7 de la mañana, que era cuando solía comenzar, a las 4 y 33 de la madrugada, también señaló que el lugar de su trabajo era la garita y no el socavón.
Alexander era el único hijo de esta pareja de esposos. Llevaba 8 meses laborando en esta mina y tenía muchos sueños, entre ellos, convertirse en policía.
Su abuelo, muy destrozado con la pérdida de su nieto, pide al Gobierno y a las autoridades que reaccionen y no mantengan tanta indiferencia ante esta inseguridad que está destruyendo al país.
Vecinos dolidos e indignados esperan que la minera se pronuncie y asuma todos los gastos que viene solventando la familia del joven trabajador. Alumnos de la I.E. P. Mariano Melgar, el colegio donde Alexander cursó su etapa escolar, llegaron al velorio en su vivienda, ubicada en la parte baja del distrito trujillano de La Esperanza.