Según testigos, el ataque ocurrió cuando la unidad había salido de su paradero en la localidad de Paiján provincia de Ascope.
Eran 5.10 de la madrugada del domingo, cuando delincuentes dispararon más de seis veces contra la carrocería del vehículo. Afortunadamente, no se registraron heridos, pero el pánico entre los ocupantes fue inevitable.
Se supo que el bus venía con 4 pasajeros a bordo.
Este atentado se suma a la ola de violencia que azota el transporte interprovincial en la región. Fuentes policiales señalan que la agresión sería una represalia de bandas criminales que exigen el pago de cupos para permitir que los conductores trabajen sin ser blanco de ataques. En las oficinas de dicha empresa interprovincial, choferes laboran en medio de mucho temor.
La empresa “El Dorado”, al igual que otras compañías de transporte, ha sido víctima de amenazas constantes, lo que mantiene en zozobra a los conductores y pasajeros que deben viajar a diario por esta ruta.
Las autoridades han iniciado las investigaciones para identificar a los responsables y frenar estos actos delictivos que siguen poniendo en riesgo la seguridad de los ciudadanos. Entretanto, la población exige mayor presencia policial en las carreteras para evitar nuevas agresiones.