Esta casona ubicada en la cuadra 8 del Jirón Pizarro, en pleno centro histórico de Trujillo, presenta pintas realizadas por desadaptados, lo cual ha generado indignación entre vecinos y transeúntes. Este inmueble, que por años albergó una boutique, ahora luce deteriorado, con vigas de madera que sostienen su fachada de adobe y daños provocados por actos vandálicos.
Según la propietaria, la situación del predio se complicó tras la demolición de la vivienda contigua, lo que habría afectado su estructura. Actualmente, la casona presenta un evidente riesgo de colapso, mientras que la fachada, que forma parte del valioso patrimonio arquitectónico trujillano, permanece en estado vulnerable y sin resguardo.
Vecinos y transeúntes advirtieron que el peligro es mayor porque el inmueble se encuentra frente a un centro educativo y en una concurrida zona peatonal, a pocas cuadras de la Plaza Mayor. Ante ello, exigieron a los dueños y autoridades competentes tomar medidas inmediatas para evitar una tragedia y preservar este histórico inmueble que forma parte de la identidad cultural de la ciudad.


